Golden Kamuy
Golden Kamuy
Autor/es: Satoru Noda
Formato: Rustica A6
Estado: 21 vol- puplicados
Editorial: Milky Way
Seinen – Historica
Sinopsis Editorial:
Año 37 de la era Meiji. Tras sobrevivir a la guerra Ruso-Japonesa, Sugimoto, apodado “el Inmortal”, se une a la fiebre del oro para ayudar a la viuda de uno de sus amigos caído durante el conflicto.
En su búsqueda, alguien le revela que existe un tesoro escondido y que las distintas claves para encontrarlo las llevan tatuadas en sus espaldas peligrosos convictos prófugos. En su camino se topará con Asirpa, quien no solo le salva la vida, sino que además le ayudará a sobrevivir en la dura tundra salvaje.
¡La carrera por hacerse con el tesoro ha comenzado!
Opinión Librería:
Pocas obras manga son tan complicadas de explicar con pocas lineas, donde sinopsis editorial se queda tremendamente corta.
La historia, el origen de la idea, gira entorno a una cultura, la Ainu y el titulo con ese Kamuy, ya deja claro que es esta cultura el centro de la obra. Y puestos a elegir una etnia compleja y desconocida en occidente, no podían escoger otra mejor.
Esta etnia es la autóctona del norte de Japón y en concreto de la isla de Hokkaidō, y ahí ocurre buena parte de esta historia.
En un periodo entre guerras, justo después de la que enfrentaron a japón y rusia, un veterano de guerra recorre la isla de Hokkaidō en búsqueda de un supuesto tesoro robado al pueblo Ainu. Aquí es donde se encuentra con Asirpa, una joven Ainu que le descubre todos los secretos de supervivencia de su pueblo.
El manga, aparte de su eje central en búsqueda de un tesoro, es un recorrido por la cultura y costumbres de un pueblo desconocido y extraño con orígenes que se remontan a los albores de la humanidad. Cultura, costumbres, lenguaje, naturaleza y supervivencia. Documentado y con referencias. Algo bastante inaudito en el mundo del manga.
Es una parte completamente desconocida de Japón que nos adentra en la complejidad de su cultura y pasado. Nos trae un mundo desconocido del que seguro queramos saber más. La obra también hace un poco justicia, al ser una minoría étnica oprimida y con derechos limitados en japón hasta casi el mismo siglo XXI donde se les reconoció con todos los derechos.
Y como no, la calidad del dibujo es asombrosa, como suele ser todo lo que edita esta editorial.